C'mon!!!

Hoy no pienso hacer nada, me apetece tarde de pelis, que el sábado tocaba y al final nada de nada. Venga, sí, tarde tranquilita, que ya era hora.

Grlll, grllll, Metro-Goldwyn-Mayer presents... Separate Tables.

- Joder, Grainne, se ve mal, va como a saltos.

- Sí, bueno, igual se pasa, el sonido sí va bien, tampoco es para tanto.
- Lo que tú digas.
...
- Se sigue viendo mal.

- Ya lo veo. Joder, sí que se atasca. ¡Pero si ahora se le va el sonido!

Ring.

- Espera, hija, párala *momento en el que madre recibe felicitaciones de hermana* Hala, ya la puedes poner.

- No, si la voy a poner en el portatil, a ver si se ve un poco mejor...

Dos minutos después

- Pues sí que se ve mejor, sí, pero que pantalla más pequeñita.

- A ver, vamos a ver la peli o qué?

- Señor, sí, señor.

- Vale.

Ring

- Pero, bueno, ¡quién cogno es ahora!

- Errr, espere, mamá ¿conoces a un Pepito Perez?

- Sí, es el del bajo, qué pasa.

- Es una señora, que dice que si sabemos su teléfono.

- Pues no, que me voy a saber yo su teléfono.

- Es que dice que le está llamando al móvil y que no lo coje.

- ¿¿Y??

- Pues que si podemos dejarle una nota en su casa, para que le llame.

- LOL Pero vamos a ver, que no le localiza y quiere que nosotros, que no le conocemos de nada, le dejemos una nota. ¿¿¿???

- No, que dice que no es urgente, que cuando bajemos a por algo a la calle aprovechemos y le dejemos la nota.

Grainne con la vena ya a punto de estallar: - Pero vamos a ver, si no es urgente para qué coño quiere que le dejemos la nota, y además ¡¡¡qué coño nos importa, joder!!!

- Errr, vale.

- ¿Ya? ¿Podemos retomar la peli? Bien, sigamos.

- Espera, para, que voy al baño.

- ¬¬

- Ya he meado.

- Enhorabuena.

- ¿Por dónde iba?

- El coronel le ha devuelto los seis peniques de la llamada.

- Ah, me acuerdo que una vez una amiga me pidió 5000 ptas, cuando 5000 ptas eran 5000 ptas...

- Pero vamos a ver, estamos viendo la peli o qué, que quedan cinco minutos leñes!

- Vaaale.

Por fin terminamos de ver Separate Tables. Coloquio tras la peli. Muy buena, un guión sin trampas y muy sólido, y unos personajes muy bien definidos e interpretados.

- ¿Vemos otra? ¿Muerte entre las flores? Venga, va.

Brrrrrrr (ruidito de telefonillo, por si no os habíais dado cuenta)

- Pero, bueno, y ahora ¡qué!

- ¿Sí? - Oiga, es que la llave no me abre, me puede abrir?

- Pues acabo de dejar a Tommy discutiendo con Leo, pero no faltaba más, mujer.

- ¿Ein?

- Que ya la abro.

- ¿Quieres saber lo que hacía Ripoll para saber si coger el telefonillo?

- Pues no, quiero ver la peli tranquilamente, si me haces el favor.

- Ok.

Riiingggg

- Esto es una confabulación, en serio, ¿Siiiií?

- Joder, hija, que manera de coger el teléfono.

- Ya, es que estoy intentando ver una peli, y subrrayo el intento.

- Bueno, pásame con tu madre.

Dos minutos, habéis leido bien, dos minutos después.

- Pero qué pasa, se ha ido la imagen.

- No, se ha apagado la tele sola.

- No me lo puedo creer, no-me-lo-puedo-creer. Y ahora se vuelve a encender. Lo has hecho aposta, no?

- Te juro que el mando está encima de la mesa, él solito.

- Uno dos y tres, cuatro cinco seis, yo me calmaré, todos lo vereis. Cómo vuelvan a llamar por teléfono, mato a alguien.

Una gloriosa y silenciosa hora después...

Ding dong

- Uy, es madre, no sabía que habías salido.

- Estaba en la farmacia.

- Pues muy bien.

- ¿No vas a ver la peli?

- Estoy esperando a que le cuentes a tu marido lo que has comprado en la farmacia. ¿Ya? Vale.

Dos, dos minutos después: Riiiinnggggggg

- Joder, me cago en todo lo que se menea, no llama nadie nunca, y el único día que por fin intento ponerme con la cola de pelis que tengo pendientes, llama todo cristo, me cago en San José, y en los vecinos y en ¡joder!

- Es para tí.

- Err, hola Garlic, hija es que parece que el mundo se confabula para que no vea Muerte entre las flores.

- Ay, pues esa peli me encanta, no sé por qué no te dejamos verla.

- Pues eso mismo digo yo.